A Flor de Piel

Desnudez, palabra que indica el despojo de atributos que cubren o adornan un objeto, que visten a una persona. Palabra que hoy en día tiene protagonismo, muchos propósitos y que desviste a protestas callejeras. El desnudarse ante el lente de una cámara, el pincel de un artista o entre sabanas, denota cierta intimidad, la creación de una atmósfera, un romance temporal entre los involucrados. El lugar puede limitarse a cuatro paredes o extenderse al aire libre. Desnudarse con fines románticos, artísticos o sexuales implica confianza, un redescubrimiento de sí mismo, y algo nuevo que ofrecer.

El desnudo, ha estado presente a lo largo de la historia del hombre. Tanto en el contexto religioso como histórico, el hombre ha estado ligado a la naturaleza, a ser parte de ella sin artificios. Recordemos que el paraíso de Adán y Eva podría ser hoy en día un campo nudista del caribe. De no haber pecado, la humanidad viviría en aquel paraíso eterno, una búsqueda inconsciente que se refleja en estos días. Miguel Ángel pintó la Capilla Sixtina, y en sus muros se conservan frescos de Rafael, Roselli, Perugino, Botticelli, Signorelli y Ghirlandaio, artistas inspirados en el cuerpo humano abundante, rolludo, grosero, hombre o mujer, niño o guerrero, plasmados en muros y lienzos.

Pero ¿por qué la gente se desnuda?, ¿Qué estimula a las personas a desnudarse continuamente?

Algo insólito, pero real sucede en Cataluña, España. “Las leyes de España prohíben exhibirse de forma obscena o por la fuerza ante menores, pero no contemplan sanciones a la desnudez pública”. Fuente Perú 21, 02/09/04. Se permite y no es contra la ley, no atenta contra la moral, ni el orden público el transitar por las calles totalmente desnudo. Es válido elegir el grado de desnudez por voluntad o necesidad.

Para Georgui Smaguin, ex - profesor de sociología de la Universidad Privada del Norte, estas manifestaciones de desnudo moderno, exhibicionista, responden a un absurdo, pues durante millones de años el hombre prehistórico, se cubrió el cuerpo, y la razones pueden ser consecuencia de frío o protección a sus partes.

“Si el ser humano aún teme su desnudez, cómo va a cambiar la sociedad”, Spencer Tunick, fotógrafo.

Spencer Tunick, es el fotógrafo que ha logrado ver a más personas desnudas en el mundo. La cifra llega a 40 mil cuerpos de diferentes formas, colores y tamaños, completos o no. Desde 1994 a la fecha, el lente de Tunick ha logrado atraer cual flautista de Hamelin, a miles de personas en busca de un comportamiento atrevido. Los móviles se amparan bajo la protesta, rebeldía, llamar la atención, libertad, curiosidad o simplemente considerar que, con la mayoría de edad todo es permisible, y más aún, si en el ocaso de la vida, el desnudarse en público otorga el clímax culminante de una vida decorosa.

Irónicamente, Spencer Tunick ha sido arrestado muchas veces en NY, por alterar el orden público y atentar contra la moral.

“En su casa en Nueva York, su esposa tiene encendida la licuadora. No suena tan lejano el 25 de abril de 1999, cuando fue arrestado por intentar fotografiar a 150 voluntarios frente al Times Square. Le pusieron una denuncia por alterar el orden público y conducta inmoral. Era parte de su proyecto Naked States (Estados Desnudos), quitar la ropa a los 50 estados que conforman la patria de George Walker Bush. Llegó a la Corte Suprema y venció.
A pesar de todo, en su país no trabaja tranquilo. Sigue perseguido por los conservadores; “esos que no entienden la belleza del cuerpo desprovisto de prendas”. O lo ven como simple pornografía. “En los Estados Unidos crea menos controversia transmitir cuerpos mutilados por un tanque, que el más puro cuerpo bello desnudo”, dice Tunick. (Fragmento entrevista hecha por Martín Mucha en la Web)

Legislaciones encontradas son las que han producido los desnudos masivos de Tunick. Mientras que Estados Unidos lo arresta, gobiernos y municipalidades de otros países colaboran con él, para la realización de sus “instalaciones humanas” como él las denomina.

Para el profesor Gerardo Cailloma, todo es simple relatividad. La Isla Borhol en el mar báltico tiene una legislación que permite la práctica del nudismo dentro de la isla, solo se hace hincapié en el uso de ropa interior, cuando se utilice un medio de transporte público por cuestiones de higiene y para evitar cualquier tipo de enfermedad.

Considera que el tema del nudismo gira en torno al contexto. Una persona que ingrese vestida a un campo nudista agrede al resto, ya que eso no es normal en esas circunstancias. Lo mismo sucede con los carnavales de Rio, para los europeos los carnavales de Brasil son un escándalo. Sin embargo toda esta algarabía sexual, en un país tan religioso como Brasil, no va más allá de una fiesta popular y de identidad. Los musulmanes, obligan a las mujeres a cubrirse por completo con vestidos largos y la odiosa burka, que impide verles el rostro. Para ellos es inmoral y amerita un castigo, si una porción de piel salta a la vista de los demás.

Las protestas en las calles, con fines políticos, ecológicos, en nombre de los derechos humanos o en contra de una guerra, se han vestido de piel, y han llamado la atención de la prensa y la opinión pública. Recordemos que grupos ecologistas como Green Peace, o Ecologistas en Acción, se han quedado literalmente en bolas, en nombre de las ballenas, por evitar pruebas nucleares en medio del mar y ser antagónicos de legislaciones que atentan contra la ecología mundial. La convicción de estos activistas los ha llevado a soportar bajas temperaturas, garrotes de policías y frías carceletas.

En el Perú, algunas marchas tuvieron como protagonista a pequeños grupos de personas que, imitando a protestas extranjeras se animaron a marchar en ropa interior.

Simplemente todo es relativo, y como dice Pau Donés vocalista de Jarabe de Palo “depende, todo depende, de según como se mire, todo depende” depende para escandalizarse, para levantar un dedo acusador, pera emitir una opinión mojigata o una aprobación.

Fasala